Turismo y mucho más!!!

▪️ Estos manglares están contiguos a la zona oriental del Refugio de Vida Silvestre Humedal Bahía de Panamá, propiciando la conectividad ecológica entre ambas áreas. 

▪️El trabajo con la comunidad es fundamental para generar conciencia sobre los peligros de atentar contra este importante ecosistema.

El Ministerio de Ambiente (MiAMBIENTE) reafirma su compromiso con la preservación y protección de los humedales de Panamá Viejo, reconociendo su inestimable valor ecológico y cultural, a través de iniciativas de investigación, educación y acción comunitaria, suma esfuerzos para asegurar la conservación de este ecosistema esencial, crucial tanto para la biodiversidad local como para la herencia histórica de Panamá.

Se hace preciso, mencionar que en el marco de los 505 años de fundación de la ciudad de Panamá, MiAMBIENTE resalta la importancia de esta formación vegetal, los cuales constituyen una barrera de protección para la población, reduciendo el impacto del viento y los oleaje sobre la costa.

La importancia ecológica del sitio de Panamá Viejo es única, funge como fuente de alimento, refugio y reproducción para miles de aves playeras, las cuales obtienen la energía necesaria para satisfacer sus necesidades básicas al alimentarse de gusanos marinos en la zona intermareal, durante su ciclo migratorio, especialmente para el invierno ártico.

Este humedal tiene una superficie aproximada de 83 hectáreas, de las cuales, 66 hectáreas son áreas de fangal y 17 hectáreas son áreas de manglar. Estos espacios naturales sirven de alimento a especies como los pargos, robalos y corvinas.

Al respecto, Samira Kiwan, bióloga de MiAMBIENTE  explicó que la flora del área se compone principalmente de mangle blanco o mariangolo (Laguncularia racemosa), que cubre el 90 % de la superficie del manglar, y mangle salado o mangle negro (Avicennia bicolor), que representa el 10 % restante.

Amenazas

Pese a su gran riqueza natural, esta zona se ha visto afectada por la contaminación, específicamente por aguas servidas, residuos sólidos, grasas, aceites e hidrocarburos que son vertidos en drenajes y ríos, los cuales llegan a los océanos y perjudican los manglares y a las especies que en ellos habitan.

La educación es clave

MiAMBIENTE, a través de la Dirección de Cultura Ambiental, realiza jornadas de voluntariado, mediante la limpieza de playas, además, existen dos Organizaciones de Base Comunitaria (OBC) que desarrollan jornadas de saneamiento y sensibilización sobre el cuidado de estos espacios marino-costeros en fechas alusivas a su protección.

Adicional, el Patronato de Panamá Viejo organiza diversas actividades de educación ambiental para crear conciencia sobre la importancia del manglar.

Kiwan afirma que actualmente se han establecido parcelas de monitoreo para investigar la influencia de los fenómenos climáticos que han causado defoliación (pérdida temprana de hojas) y muerte de los manglares a raíz del evento de El Niño 2015-2016. La finalidad es documentar la recuperación de un manglar después de estos eventos.

La bióloga puntualiza que los resultados de esta investigación serán importantes no solo para comprender la recuperación actual de los manglares, sino también, para comprender con mayor precisión, otros aspectos que están influyendo en el fenómeno, y nos permita tomar las medidas a futuro y las recuperaciones futuras, evitando que repita con mayor frecuencia debido al cambio climático.